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Celebraciones compartidas

Por Susannah Goshko*  Este fin de semana me estuve preparando para pasar mi primera Navidad en México y, mientras acomodaba los regalos para mi familia y amigos debajo del árbol, reflexioné sobre cómo, a pesar de las distancias o diferencias culturales, las tradiciones nos unen y enriquecen. Desde que llegué a México he podido descubrir algunas similitudes y diferencias de cómo celebramos estas fechas en hogares mexicanos y británicos, y les quiero compartir algunos de mis descubrimientos.  Creo que llegué en la mejor época del año, pues ya viví mi primera posada mexicana, que aquí marca el inicio de la temporada navideña. La experiencia de pegarle a la piñata y ver a adultos y niños disfrutando de la fruta y los dulces es indescriptible. Por supuesto, la comida y el ponche hacen que las noches frías, no tanto como en Londres, sean más llevaderas.  En Reino Unido, también entramos en calor con el mulled wine (vino caliente), que se puede tomar al visitar los mercados navideños, que son tan tradicionales en nuestros pueblitos y ciudades, pues son la mejor manera de despertar el espíritu navideño. Con sus decoraciones y luces por doquier y venta de productos artesanales, comida y bebidas típicas, son espacios que te permiten encontrar el regalo perfecto para tus seres queridos.  Un punto que tenemos en común es que, tanto en el Reino Unido como en México, la familia está al centro de las reuniones navideñas. Estas fechas son una gran oportunidad de convivir y estar juntos, pero lo que me parece muy interesante es la diferencia en el día de la celebración.  Mientras que en México todos se reúnen a cenar y festejar el 24 de diciembre y a abrir regalos la mañana siguiente, en Reino Unido las familias intercambian regalos el día 25, y la cena navideña es esa misma noche.  Además, en Reino Unido tenemos el Boxing Day, un día después de Navidad, donde convivimos con la familia y amigos, desde reunirnos para el recalentado y abrir más regalos, hasta hacer caminatas en la naturaleza.  Claro que no podemos olvidar otro elemento muy importante en estas fechas: la comida. La gastronomía navideña de cada país es una forma de expresar nuestra cultura, y los platillos preferidos dicen mucho de sabores e ingredientes favoritos. En México, la Navidad es sinónimo de bacalao a la vizcaína, romeritos o tamales de distintos tipos, y para cerrar con un toque dulce, la típica ensalada de manzana o buñuelos con miel.  En cambio, en las mesas británicas es muy común cenar pavo, acompañado de papas asadas y pudín Yorkshire y, de postre, tenemos mince pies (pequeñas tartas rellenas de frutos secos y especias) y el famoso pudín navideño, elaborado con fruta seca y servida normalmente con mantequilla al brandy. Éstas son sólo algunas de las tradiciones que compartimos y nos hacen únicos, y hay otras que no pude incluir como son las botas navideñas con pequeños regalos, los calendarios de adviento y demás tradiciones, que no son más que otras oportunidades de mostrar nuestro cariño y buenos deseos con seres queridos.  Pero algo que queda claro es que, a pesar de las diferencias culturales y geográficas, las festividades y espíritu navideño son elementos adicionales que compartimos en nuestra bicentenaria amistad. En los cuatro años de mi encargo en México espero conocer más sobre la cultura y tradiciones mexicanas, pues sé que, incluso dentro del mismo país, hay tradiciones que son propias de cada estado o que diferencian las celebraciones, por ejemplo, del norte, centro o sur de la República mexicana.  Y, antes de desconectarme unos días para disfrutar estas fechas con mi familia, quisiera desearles ¡felices fiestas y que tengan una linda Navidad! Cuéntenme, ¿qué otras tradiciones mexicanas debería de conocer y experimentar? Les leo en redes sociales en X e Instagram, @SusannahGoshko y @UKinMexico.   *Embajadora designada del Reino Unido en México Columnista: London eyeImágen Portada: Imágen Principal: Send to NewsML Feed: 0