X

Vous n'êtes pas connecté

Maroc Maroc - AGENSUR.INFO - A La Une - 08/Mar 15:10

Diez mil hombres que buscaban el mar

 Por Arturo Pérez-ReverteHace casi cincuenta años busqué el mar en compañía de diez mil soldados griegos. En realidad no se trataba del mar, sino de un río y una frontera, y los soldados no eran griegos sino eritreos; que tampoco eran diez mil, porque los bombardeos y la aviación etíope los había reducido a unos pocos centenares. El caso es que con ellos anduve, intentando regresar a casa, durante dos semanas en las que fui, como mis compañeros de aventura, consciente de que derrota significaba aniquilación. En aquel desastre, donde se trataba esencialmente de llegar vivos, nadie cuidó de mí y tuve que hacerlo solo, con los medios de que disponía. Pero llegamos, al fin. Y gracias a eso puedo contarlo. Lo mejor de leer libros antes de enfrentarte a la vida es que luego, cuando la vida llega, todo te suena de algo. Me había ocurrido antes en otros lugares. Desde el principio descubrí, primero con asombro y luego con fascinado interés, que es posible proyectar lo leído en cuanto la vida depara, y eso permite interpretar mejor, reconocer los paisajes y a quienes para bien o para mal los habitan. Es lo bueno que tiene, antes de que el azar te sitúe de verdad allí, haber estado en el vientre oscuro del caballo de madera dispuesto a degollar troyanos, empuñar un arpón en una ballenera del Pequod o esperar, rodeado de cadáveres de amigos templarios, la última carga de la caballería enemiga en los cuernos de Hattin. En una de las novelas de Alatriste, en plena batalla de las bocas de Escanderlu, alguien pregunta al capitán, que lleva un libro en el bolsillo, para qué sirve eso en una galera, a lo que él responde: «Para soportar días como éste». Y no hay verdad igual. Durante aquellos días de penosa retirada en los que viví con el alma en la boca, sin más sombra que la de mi sombrero, sucio, sediento y con el estómago vacío, con las perneras del pantalón manchadas de una costra seca a causa de los cólicos de sangre —tenía 25 años, hoy no habría sobrevivido—, un libro me serenaba la cabeza, recordándome que sólo vivía algo que millones de seres humanos habían sufrido antes que yo. Que no era tan grave, ni tan dramático, ni tan terrible. Que sólo era la vida, y quizás —consecuencia de esa vida— la común y simple muerte. Había sido Gloria, mi profesora de Griego, la que diez años atrás me había hecho leer y traducir a Jenofonte. Y aquel libro, la Anábasis o Retirada de los Diez Mil, me había causado tanto impacto como la Ilíada, la Odisea o el canto II de la Eneida: el relato, contado por uno de los protagonistas, de cómo, tras ponerse al servicio de Ciro el Joven, pretendiente al trono de Persia y muerto en una batalla, un ejército de mercenarios griegos, degollados sus comandantes por una traición, enfrentado al dilema de rendirse o retirarse combatiendo, emprende una dura marcha a través de cinco mil kilómetros de territorio enemigo, luchando sin descanso para alcanzar las orillas del Mar Negro y volver a casa. Desde el primer día, con la primera línea que traduje —Así murió un hombre valiente, Cleónimo el espartano, alcanzado por una flecha— Jenofonte ganó mi corazón. He leído su relato innumerables veces, así como los Recuerdos de Sócrates, de quien fue discípulo antes de abrazar el oficio de las armas. Aventurero y escritor, Jenofonte fue su propio historiador, con un estilo sobrio y poco profundo, pero que deslumbra con la sólida sencillez del soldado que supo ser. No esquiva crueldades, saqueos y matanzas, pues tales son los usos de la guerra —Mutilaron salvajemente los cadáveres para que su visión inspirase terror al enemigo—; pero en toda la obra pone de manifiesto con arengas y diálogos memorables, como griego culto y hombre de letras que también era, la utilidad del uso de la razón y la palabra, armas tan adecuadas como el hierro y el bronce de las falanges hoplitas para resolver situaciones difíciles. Y bueno, qué diablos. Hay momentos de la Anábasis que todavía me erizan la piel y me ponen un nudo en la garganta, igual que ese primer día. Ha vuelto a ocurrir hoy mismo, cuando para escribir estas líneas he hojeado la edición en griego de Konstantin Matthiä, que desde hace más de medio siglo tengo llena de subrayados y anotaciones, con mi primera traducción escrita con lápiz al margen: De pronto oyeron a los primeros soldados gritar «Talassa, talassa» porque veían el mar. Entonces todos empezaron a correr colina arriba, y cuando llegaron a la cima se abrazaban entre ellos, incluidos generales y capitanes, con lágrimas en los ojos. © XLSemanal

Articles similaires

Sorry! Image not available at this time

La Fageda refuerza su gama de yogures griegos

financialfood.es - 28/Feb 15:13

La Fageda amplía su gama de yogures con un nuevo Natural estilo Griego Ligero, que se convierte en la cuarta referencia de La Fageda en el segmento...

Fernando Navarro, escritor: "Igual lo auténtico no está en el campo sino en cómo uno se comporta con la tecnología"

eldiario.es - 05/Mar 21:04

El guionista de películas como 'Verónica' o 'Segundo premio', o la serie 'Romancero', publica su primera novela, 'Crisálida', sobre una familia que...

Sorry! Image not available at this time

Grave denuncia de Ana Peleteiro: «Llevo un mes muy chungo, recibí amenazas y coacciones»

abc.es - 07/Mar 20:29

Minutos después de proclamarse campeona de Europa de atletismo en triple salto, Ana Peleteiro apenas pudo aguantar un vendaval de emociones...

Sorry! Image not available at this time

Albert Luque: «Me dolió que mi amiga Jenni ni siquiera me escuchara»

abc.es - 06/Mar 19:43

El 20 de febrero, a la vez que Rubiales era condenado por agresión sexual a Jenni Hermoso, sentencia que le ha supuesto una multa de 10.800 euros y...

Apuntes sobre visibilidad en momentos de niebla

eldiarioar.com - 07/Mar 11:17

Una lesbiana genera frustración y es un chivo expiatorio por mostrar que nadie se adecúa a lo que persigue, de que el signo no se adecúa a la cosa....

Sorry! Image not available at this time

Manuel Sánchez Ortiz : «En la casa de Luis Cernuda han aparecido pinturas al fresco que vamos a respetar»

abc.es - 24/Feb 05:55

―Son cuarenta años los que usted lleva restaurando y consolidando edificios patrimoniales. ―Como Manuel Sánchez, diez años más. Y con mi...

Un diagnóstico de cirrosis recién cumplidos los 40: “Tomaba mucho los fines de semana, pero no a diario”

eldiarioar.com - 06/Mar 09:11

Los hepatólogos advierten de un aumento de los diagnósticos de enfermedades hepáticas asociadas al consumo de alcohol y empiezan a ver pacientes...

Desmembrar el instinto

eldiarioar.com - 24/Feb 09:39

¿En qué momento algo que nos protege y resguarda durante tanto tiempo se convierte en un peligro? Hace más de diez años, cuando nos...

Viajó de Trelew a Posadas para rehabilitarse de las drogas y seis años después busca a su "ángel al volante"

eldiarioar.com - 03/Mar 03:16

Un boleto, un viaje y un encuentro fugaz que marcó su historia. En 2019, Marcos subió a un micro sin rumbo claro, con la esperanza de una última...

Karla Sofía Gascón rompe su silencio tras los Oscar: "El dolor fue tan abrumador que contemplé lo impensable"

eldiario.es - 16:03

La actriz española, nominada al Oscar por su papel protagonista en Emilia Pérez, ha estado en el centro de las críticas a raíz de sus...

Les derniers communiqués

  • Aucun élément