Maroc - AVOZDELAREPUBLICA.ES - A La Une - 24/Jan 09:00

La oleada oligárquica

La oleada oligárquica España en el punto de mira de las iras del trumpismo Ya la palabra millonarios parece haber perdido valor para designar a los muy ricos y ahora se dice milmillonarios. Los más milmillonarios norteamericanos son los que rodean ahora la presidencia de Trump, con el saludo romano para significar su querencia fascista, escenificando la nueva toma de la Casa Blanca, ocupando las poltronas del gobierno más oligárquico de la historia del capitalismo. El ascenso del fascismo en los EEUU se concentra en la persona del multimillonario y delincuente Donald Trump, presentándose como un elegido por Dios, quien pone en manos de los oligarcas tecnológicos y del dinero la ilusión de una “Edad de oro”, de un nuevo Dorado del capitalismo y del imperialismo en crisis y descomposición. Su grito de guerra es entre otros el del “Destino Manifiesto”, el grito reaccionario de los esclavistas expansionistas. Pero Trump se sobreestima y no alcanza a entender en su soberbia que su reino tiene los pies de barro de un sistema en descomposición, metido por sus propias contradicciones en un verdadero callejón histórico sin salida. Bajo la autoridad de Trump el Estado sionista se vio obligado a firmar un acuerdo de alto el fuego que divide al gobierno de Netanyahu, y no se respeta por quienes ocupan tierra palestina y, en particular, por las bandas de colonos armados hasta los dientes. Desde el día que ganó las elecciones Trump, afirmó “que asumirá la presidencia con un acuerdo bajo el brazo para la puesta en libertad de los rehenes”. Un acuerdo firmado destinado a ser incumplido. Ya desde el primer día se quiso establecer un pacto similar entre Ucrania y la Federación Rusa sin conseguirlo, en detrimento de la gloria de Trump y de su política de terror sobre todas las cuestiones fundamentales. La escenificación de la toma de la presidencia necesitaba instrumentalizar falsos acuerdos de paz. El alto el fuego en Gaza es una tregua que desde hace mucho tiempo reclama la población, pero que no apunta hacia solución democrática alguna en relación con el fondo de la cuestión, que no es otra que el fin de la ocupación imperialista del pueblo palestino, aliñada con las peores especies de racismo y apartheid; con el mayor genocidio conocido en las últimas décadas. Como ha escrito una abogada palestina estadounidense, “un alto el fuego puede impedir que el cielo se derrumbe sobre Gaza, pero ya están creadas las condiciones que limitan la posibilidad de vida”. La tregua firmada comprende cuarenta y dos días, y la ayuda humanitaria ha vuelto a los pueblos destruidos para combatir el hambre y las enfermedades de la población, mientras que las fuerzas terrestres del ejército de ocupación se retiran, pero manteniendo en todo momento el embolsamiento opresivo de la población de Gaza, comenzando con el intercambio de prisioneros y rehenes. El mismo Netanyahu ha subrayado el carácter temporal del alto el fuego, impulsado tanto por Biden como por Trump, y nada ha dicho de cómo el Estado de Israel es especialista en incumplir los acuerdos tanto de alto el fuego, como de paz: y todo para mantener una ocupación ilegal y criminal, que se prolonga desde 1948. La paz en Oriente Próximo requiere la Asamblea Constituyente de la República Palestina Libre, que acabe con la ocupación sionista, la segregación racial y el apartheid; que garantice el regreso de los palestinos en el exilio desde 1948, y la verdad, justicia y reparación de los crímenes de guerra y genocidio. El ya presidente de Estados Unidos ha firmado órdenes ejecutivas como Franco firmaba penas de muerte, comprendiendo desde la caza y captura de millones de inmigrantes a la salida de la Organización Mundial de la Salud y del Acuerdo de París sobre el medio ambiente; indultando a 1.500 extremistas condenados y/o procesados por graves delitos en el asalto al Capitolio de hace ahora cuatro años; realizando una declaración general de guerra a los trabajadores y pueblos del mundo. Y entre las muchas guerras declaradas por Trump, desde la primera hora de su presidencia, de todo tipo de contrarreformas sociales, económicas y comerciales, se encuentra la amenaza de ocupación de Groenlandia, Canadá, Panamá…, e incluso del planeta Marte. También una amenaza muy singular dirigida a España, a la que confunde o finge confusión como si fuera miembro de los BRICS, hablando de gravar el 100% de sus exportaciones si no contribuye al gasto militar en la forma que él establece, con el 5% del PIB. Dócilmente el presidente Pedro Sánchez le hacía saber al emperador que su gobierno es el décimo mayor contribuyente de la OTAN, agregando que en los últimos diez años España ha aumentado un 70% de gastos militares, a lo que se suma la participación en buena parte de las misiones de guerra, de manera “muy superior a la media de la OTAN”. Llegando al punto lacayuno de considerarse “un socio confiable”. El socio confiable de Trump, que alardea de que la economía que dirige es una de las mejores economías del mundo, ha sido retratado en su gestión de gobierno en informe económico recientemente  realizado  por Oxfam Intermón, que lleva el título “El saqueo continúa”, en el que se subraya el vertiginoso aumento de la riqueza en España para unos pocos: “La riqueza  conjunta de los 30 milmillonarios españoles superó los 185.000 millones de euros en 2024, lo que supone un incremento de más de un 20% respecto al año anterior; y a nivel mundial aumentó en 1,94 billones de euros en 2024, mientras que el número de personas en situación de pobreza apenas ha cambiado desde 1990”. El informe de Oxfam Intermón precisa aún más la situación económica de profunda desigualdad social, diciendo: “La economía mundial actualmente está capturada por una pequeña élite privilegiada que no solo acapara la riqueza, sino también el poder. Evidenciando que el 60% de la riqueza de los milmillonarios es heredada, marcada por el clientelismo o vinculada al poder monopolístico y que no es necesariamente el resultado del esfuerzo y dedicación, sino que es, junto al colonialismo, lo que origina la acumulación extrema de la riqueza de los milmillonarios”. Continúa el Informe diciendo “La realidad es que muchas de estas grandes fortunas se construyen sobre privilegios heredados y sistemas que perpetúan la concentración de poder… Solo tenemos que mirar lo que está ocurriendo en EEUU, con un presidente milmillonario al mando de la primera economía del mundo, que va a gobernar con el apoyo de Elon Musk, el hombre más rico del mundo. Acompañados de toda una oligarquía del dinero instalada en el poder económico y ahora dueña del poder político”. Advirtiendo en el caso español el fenómeno especulativo de “la crisis de acceso a la vivienda sin precedentes, agravada durante años por recortes en los sistemas de salud y educación en favor de la privatización de los servicios públicos más esenciales”. La situación de la economía española depende, en última instancia, de la gestión política caracterizada por el hecho de que el Gobierno de coalición ha comenzado a recibir derrotas parlamentarias de su oposición tradicional conformada por PP y Vox, a la que se ha sumado Junts, de manera que no ha podido prorrogar el gravamen de las multinacionales energéticas, ni revalorizar las pensiones, y tampoco ha podido aprobar los descuentos al transporte, ni consolidar la subida del SMI y las ayudas relativas a la DANA. Con lo que se viene a agudizar la tendencia al desgobierno, mientras que los franquistas del PP le exigen “que, si no pueden gobernar, convoquen elecciones”. Cierto es que el “decreto ómnibus” mezcla todo de forma interesada para los planes del gobierno, pero desde el punto de vista de los intereses materiales de los trabajadores, si no se suben las pensiones, ni se hacerse efectivos los descuentos en el transporte público, si no se prohíben los cortes básicos de agua y energía y los desahucios de las familias vulnerables, hay que acudir a la movilización general para defender los intereses inmediatos de la población más explotada y oprimida.     Fuente → elespacioindependiente.wordpress.com La Voz de la República - Todas las Noticias RSS El Primer DNI Republicano