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República

RepúblicaAutor: Claudio Stassi (guion y dibujo), cartoné, 184 páginas, color. Publicado por Planeta Cómic en octubre 2024. Claudio Stassi (Palermo, Italia, 1978), actualmente vive y trabaja en Barcelona. Es un profesional con una amplia experiencia que ha trabajado para numerosas editoriales tanto italianas como extranjeras. Con Planeta Cómic ha versionado tres de las novelas más importantes de la literatura española contemporánea: La Ciudad de los Prodigios (Eduardo Mendoza), Los pacientes del doctor García (Almudena Grandes) y Nada (Carmen Laforet). Es profesor de la Escuela de Cómic Joso en Barcelona. Su último trabajo es República. El cómic comienza con la reproducción en las guardas de esta edición del histórico discurso de proclamación de la II República Española, de Niceto Alcalá Zamora, Presidente del Gobierno Provisional, discurso pronunciado el 14 de abril de 1931 y repetido íntegramente, con 7 breves partes del mismo destacadas en negrita. Hay que entender que en dicha proclamación de la República y la exaltación de júbilo que la misma provocó, según se puede comprobar en las imágenes grabadas, no se produjo ni el más mínimo incidente, sino que más bien el ambiente era festivo y de celebración por dicha proclamación, lo que contrasta con la historia que refleja este gran trabajo y sobre todo con la brutal represión que vendría después. República es el primer trabajo que Claudio Stassi realiza en solitario, está basado en hechos reales, aunque sus personajes sean ficticios. Este cómic es una auténtica sorpresa, ya que hasta ahora conocíamos la faceta de Stassi como adaptador al cómic de las grandes novelas antes mencionadas, pero no conocíamos su faceta de narrador completo, ya que guión y dibujo están elaborados por él. Con este cómic ha demostrado tener una gran maestría y ha sido capaz de crear una gran historia que nos atrapa desde el principio, que nos emociona y no nos deja indiferentes, provocándonos una profunda rabia por la dureza de lo que nos cuenta; además, dicho relato está hecho de una forma totalmente natural, sin ocultar nada. La historia comienza en un pueblo cercano a Priego de Córdoba, con unos jóvenes, Manolo e Isabel, que se gustan, que pasean juntos, y que en uno de esos paseos tropiezan con los hijos de los vencedores de la Guerra Civil, que les expresan su odio insultándoles y despreciándoles; pero Manuel no se deja humillar y se enfrenta a ellos, provocando su persecución por parte de los agresores. Durante esa persecución, y por casualidad, encuentra un cuarto cerrado con símbolos de la II República, una pequeña biblioteca con libros prohibidos, y sobre todo encuentra la grabación que Fox Movietone filmó el día de la Proclamación de la República. En esta primera escena del cómic, el odio que vemos entre los jóvenes hijos de los vencedores y los hijos de los perdedores de la Guerra Civil, no es más que el reflejo de un odio y un rencor que todavía persiste en una sociedad que no ha superado los horrores y la destrucción de la convivencia vividos durante en la Guerra Civil. A partir de este violento comienzo conocemos un poco mejor a las familias de Manolo e Isabel, familias republicanas, perdedoras de la Guerra Civil, que tratan de sobrevivir, pero que como ambas tienen a familiares directos involucrados en la lucha guerrillera que trata de derrotar a Franco y restaurar la República, en una guerra que para ellos no ha terminado, son cruelmente tratados, vejados y torturados. Quienes lo hacen, los rebeldes franquistas, consideran que las personas que apoyaron a la legalidad republicana no tienen derechos y merecen ser tratados con la máxima brutalidad posible y no dudan en emplear los medios más atroces para sacarles información. Este aspecto está especialmente representado con el personaje del sargento de la Guardia Civil, que disfruta torturando, odiando y despreciando a todo aquel que no se rija por la moral y los valores franquistas. Es fanático, despiadado, maquiavélico, déspota hasta con los suyos y, para más inri, es también un violador. A su vez, en el bando republicano, estas personas tienen una característica que las ennoblece, y son sus principios. Principios que hacen que se comporten coherentemente y con firmeza en esta situación, y que defiendan hasta sus últimas consecuencias sus ideales, a pesar de la adversidad, con el convencimiento de tener la razón y actuar de forma justa, aunque al hacerlo se expongan terriblemente ante un enemigo ruin y deseoso de venganza, que no dudará en emplear cualquier tipo de violencia con tal de imponerse a los demás. Además, vemos como en esta lucha desigual no están solos, sino que cuentan con importantes apoyos de personas de su pueblo, a la vez de que también, una parte del mismo está adoctrinado por quienes mandan y por ciertas tradiciones, y vive sin cuestionarse todo lo que está ocurriendo a su alrededor, por lo que Stassi nos muestra una sociedad dividida, en la que el abuelo de Manuel llega a decir que “vivimos en una época donde el odio mata inocentes, donde el amor puede destruir vidas en vez de crearlas y donde el egoísmo, el temor y el miedo no dejan espacio a la libertad, la igualdad y la esperanza» o “el odio puede hacer mucho daño, pero todavía más el amor”. Este cómic nos habla de la condición humana, del significado de la vida, de la responsabilidad, de las emociones, de la libertad. Es toda una lección de existencialismo; de cómo se concentra todo esto en la sempiterna expresión de las “dos Españas”, del odio, la venganza y los conflictos no superados. Nos da toda una elección de existencialismo y de todos los valores inherentes a él, ya que este cómic nos explica con naturalidad que la coherencia es un bien superior, igual que República representa un grito a la libertad, a mantener las propias ideas de humanismo que representa, aunque no sean los mejores tiempos para defenderlas. “¡La libertad, Isabel! Esta es la libertad por la que luchamos”, le dice Manolo a Isabel, con el fotograma que incluye el texto de Viva la República proyectado sobre su cara. El comportamiento de los personajes que representan los valores republicanos nos conmueve, nos hace reflexionar, y a su vez nos hace rebelarnos ante las injusticias; la lectura de esta historia nos llega muy adentro, sus personajes nos transmiten sus ideales, llenándonos de rabia y provocándonos una descarga de rebeldía y solidaridad. No obstante, entre tanta dureza, violencia y dolor hay espacio para la ternura y el amor. Desde el punto de vista técnico, su dibujo es muy bueno, realista y con un trazo potente y vigoroso, más fino, o grueso, o difuso, en cada viñeta, lo que le aporta mucha fuerza y dramatismo. Utiliza la acuarela para dar color a su trabajo, un color azulado y gris apagados, muy adecuado para contagiarnos las emociones que el cómic transmite, combinado con algunas viñetas que emplean el verde y el dorado, dando un resultado de una gran belleza. Contiene 22 viñetas a página completa y 3 a página doble que son verdaderas obras de arte, capaces de transmitir dinamismo, lo cotidiano, la ternura o una violencia brutal. Como muestra de la versatilidad y calidad en el registro y estilo del dibujo de Stassi, mencionar las 9 páginas en blanco y negro, que son como una reproducción de los fotogramas de la grabación de la Fox Movietone, con el texto del discurso del Presidente de la II República, en la que se aprecia el ambiente festivo y de celebración, alejado de toda manifestación de violencia. A su vez, el cómic contiene un dossier histórico de 3 páginas con texto del propio Stassi y dos fotografías de la época, en la que se menciona un informe de Amnistía Internacional que estima que hasta 1951, la represión franquista asesinó a más de 114.000 personas; y el trágico descubrimiento de una fosa común en Priego de Córdoba, en la que se encontraron 15 víctimas del franquismo, entre ellas un niño de unos 11 años (que podría ser el protagonista de esta historia) al que habían matado de un disparo en la cabeza, y que un sus bolsillos llevaba un lápiz y una goma de borrar; además, el cómic contiene una galería de imágenes de 10 páginas, con bocetos de los personajes y una biografía del autor. Por poner una objeción a este gran trabajo, comentar que considero que hay un error histórico de ambientación. Entre los objetos que Manuel se lleva del desván que accidentalmente encuentra, está la novela de Orwel, 1984. La escena se sitúa en el año 1943, y sin embargo 1984 se publicó en 1949 en inglés, y en 1952 en castellano. Un error menor que para nada condiciona el resultado final de este cómic. Os animo a la lectura de este gran trabajo, y a la vez a que lo tengáis en vuestras bibliotecas particulares por tratarse de un trabajo esencial que nos narra una historia muy dura, pero muy real de nuestro pasado reciente. Espero que os guste. Un saludo. Casimiro Castaño. Fuente → errepublikaplaza.wordpress.com La Voz de la República - Todas las Noticias RSS El Primer DNI Republicano