Maroc - LA NUEVA ESPANA - Gijón Opinión - 25/Jan 03:00

Repique de campanas

Este último fin de semana del mes de enero se señala como "Campaña de Sensibilización sobre la Unidades Pastorales" en todas las parroquias de Asturias. El pasado 10 de diciembre, fiesta de la patrona Santa Eulalia, el Arzobispo promulgó el nuevo mapa diocesano "coordinando" las 934 parroquias actuales en 128 Unidades Pastorales. Tengo en mi mesa, mientras escribo, en cuadernillo teórico-didáctico titulado "Unidades Parroquiales de Acción Pastoral. Criterios para su configuración". En su prólogo firmado el 24 de agosto de 1994, el arzobispo, entonces D.Gabino Díaz Merchán, justificaba el inicio de la reforma diocesana por el cambio demográfico de lo rural a lo urbano concentrándose en el triángulo Oviedo, Gijón, Avilés y, sobre todo, por el proceso de secularización que exigía, no solo una nueva organización, sino también nuevas formas de presentar el mensaje cristiano dados los acelerados cambios culturales y de mentalidad. Se resumía en la necesidad de pasar de una iglesia de cristiandad a una iglesia de misión y se alertaba de que si antes perdimos a la clase obrera, ahora podíamos perder a la juventud. Esto está pasando. La última encuesta del CIS (¿es fiable?) nos da porcentajes preocupantes. La revista Vida Nueva titula esta semana: "Los españoles ateos, agnósticos, indiferentes y no creyentes superan el 37,1% de la población". La mayoría de ese porcentaje son jóvenes. Mientras que los católicos practicantes son el 19,5 %. Estos datos justifican sobradamente que hay que proceder urgentemente (han transcurrido 30 años desde que se inició este proceso) a la reflexión y cambios, porque el mensaje está garantizado, lo que falla es la forma de presentación.